Barcelona es desde octubre de 2023 la Capital Europea de la Democracia, y durante un año organiza una serie de actividades para visibilizar experiencias de éxito y fomentar la democracia participativa e inclusiva. Hablamos de ello con Ángela Precht Gandarillas, coordinadora general de la Capital Europea de la Democracia.
¿Qué ha supuesto para Barcelona ser la Capital Europea de la Democracia? ¿Por qué se eligió a Barcelona?
En 2022 llegó una convocatoria a la ciudad de Barcelona para presentarse como candidata a ser la primera Capital Europea de la Democracia. Esta distinción es una iniciativa promovida por The Innovation in Politics Institute (IPI), con el apoyo del Consell d’Europa y de la Comissió Europea. La Capital Europea de la Democràcia (ECoD, por sus siglas en inglés) es una iniciativa europea sin ánimo de lucro que busca generar un marco de referencia pública y un debate ciudadano alrededor de la democracia y de sus retos actuales. Se trata de fomentar la participación ciudadana, visibilizar experiencias de éxito, y hacerlo en múltiples formatos y a través de diferentes disciplinas, y ejercer la voluntad de mejorar nuestras democracias, junto a la ciudadanía, la sociedad civil, los representantes políticos y las instituciones.
Un jurado experto seleccionó las tres finalistas: Braga (Portugal), Bruselas (Bélgica) y Barcelona (España). Después, un jurado ciudadano formado por más de 2.000 personas de todo el continente tenía que seleccionar la que sería la primera Capital Europea de la Democracia. La elección de Barcelona se hizo oficial a inicios de enero de 2023. Esta distinción es un reconocimiento al compromiso y al esfuerzo de Barcelona para promover una democracia activa e inclusiva.
Entramos en el tramo final de esta Capitalidad. ¿Cuál es vuestro balance?
Todavía no es momento de balances, ya que quedan muchas cosas hasta la clausura. Nos encontramos en el tramo final del programa anual con muchas actividades paralelas. Me gustaría destacar un par de ellas que creo que hablan bastante de la dimensión y calidad de actividades que se han celebrado dentro del marco de la ECoD.
La primera es el Democracy Lab, un taller intensivo (del 17 al 19 de septiembre de este año), organizado junto a Nets4Dem, que reunirá en el Canódromo de Barcelona 60 técnicos/as de gobiernos locales y profesionales de la democracia de toda Europa para promover y colaborar en la resolución de problemas implementando prácticas de innovación democráctica en el ámbito local. El objetivo es desarrollar ideas que puedan empoderar a la ciudadanía diseñando procesos que les permitan participar en la toma de decisiones, dándoles voz sobre los desafíos que afrontan las diferentes sociedades que componen los países y ciudades del continente europeo. La otra actividad es la Biennal de Pensamiento (del 8 al 13 de octubre). Sin duda, uno de los eventos más influyentes de la ciudad y que consigue una cosa preciosa que es llevar debates y conversaciones a las plazas de la ciudad.
¿Cuáles eran los objetivos que os marcabais? ¿Los estáis consiguiendo?
Para nosotros, era y sigue siendo muy importante que la ECoD sea capaz de representar los desafíos democráticos contemporáneos. Por este motivo, aunque el premio fue otorgado a la ciudad de Barcelona, vimos indispensable incorporar una perspectiva metropolitana y así incluir una visión real, amplia, compleja e integradora de la democracia y la ciudad, con sus retos y oportunidades más urgentes. A partir de aquí se empezó a pensar un programa conjunto con la Dirección de Innovación Democrática del Ajuntament de Barcelona i el Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona (PEMB). Esta colaboración ha ayudado a llegar a diferentes rincones y sitios y poder darles voz en el programa. Pero, sobre todo, ayudar a mirar una realidad mucho más compleja, rica y que te da una medida real.
Se han establecido alianzas y colaboraciones con la Generalitat de Catalunya, la Diputació de Barcelona y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB). Además, se ha configurado un Comité Asesor para acompañar y enriquecer la visión sobre el programa anual y actividades relacionadas. Este órgano agrupa a 22 instituciones, agentes relevantes y asociaciones: desde las principales instituciones del Govern de Catalunya y de Barcelona hasta universidades, organismos y asociaciones, como el Síndic de Greuges, la Federació d’Associacions Veïnals de Barcelona, la aFFaC (Associacions Federades de Famílies d’Alumnes de Catalunya), el Consell de la Joventut de Barcelona (CJB) o el Consell de Ciutat.
¿Qué actividades han sido las más destacadas? ¿Qué nos queda estas próximas semanas hasta octubre, cuando concluye la Capitalidad?
En estos momentos, dentro del programa de la ECoD Barcelona se han celebrado 30 eventos y se estima que se celebren una veintena más, tanto de carácter local como internacional, con cerca de 100 debates y unas 20.000 personas participantes. Es complejo elegir las más destacadas, ya que cada una ha tenido su impacto dentro de sus comunidades y ha sido pensada para generar una reflexión capaz de activar un cambio positivo. Dicho esto, y por su originalidad, creo que Truth, Lies and Democracy ha sido muy interesante. Se trataba de una gamejam, es decir, un encuentro de desarrolladores de videojuegos para crear prototipos de videojuegos destinados a combatir las fake news y la desinformación que tanto daño hace a nuestras democracias.
Cabe destacar, además, los dos procesos participativos que se llevaron a cabo durante la Capitalidad, diseñados con la voluntad de poder escalar e implementarse en otros sitios:
· Volem Decidir!, una iniciativa pionera que busca fomentar la participación entre los niños, niñas y adolescentes de 8 a 17 años de Barcelona, interpelándolos con una pregunta fundamental a la que tendrán que dar respuesta: «¿Cómo queremos los jóvenes participar en los asuntos de la ciudad?». Los resultados han sido tan potentes como conmovedores: algunos de los temas que inquietan a los niños y niñas de 8 a 11 años son el bullying en la escuela, la pobreza y la desigualdad o el medio ambiente y el planeta. Los adolescentes de 12 a 17 están más preocupados por las dificultades de acceso a la vivienda, los problemas del sistema educativo o el bienestar emocional.
· La Asamblea Metropolitana Manifesta, un proceso ciudadano deliberativo a escala metropolitana, formado por 60 personas elegidas por sorteo mediante inscripción previa, vinculado a la Biennal Nómada Manifesta. La Asamblea cuenta con la participación de 12 ciudades de la región metropolitana de Barcelona (Badalona, Barcelona, Cornellà de Llobregat, el Prat de Llobregat, Granollers, L’Hospitalet de Llobregat, Mataró, Sabadell, Sant Adrià de Besòs, Santa Coloma de Gramenet, Sant Cugat del Vallès y Terrassa), y busca responder a preguntas como: “¿Cómo podemos crear espacios en la región metropolitana que impacten positivamente en la cultura?”, “¿Cómo podemos hacerlo mientras adoptamos un estilo de vida más respetuoso con el medio ambiente?”.
Una vez finalizada esta Capitalidad ¿qué queda para la ciudad?
Este es otro punto interesante que estamos trabajando para poder transformar muchas de las alianzas y los temas expuestos en un legado. Es importante que todo el talento y la voluntad para trabajar para la democracia no sea un evento aislado. Se debe aprovechar todo este capital que hemos ayudado a conectar y hacer músculo. Pero todavía es demasiado pronto para explicarlo.