En la ciudad de Barcelona viven aproximadamente unas 350.000 personas de más de 65 años y 90.000 de estas viven solas, a pesar de que la previsión es que las cifras aumenten progresivamente durante los próximos años y sean 420.000 en 2038. Por el contrario, más de 100.000 personas necesitan ayuda en su actividad diaria, solo hay 13.000 plazas en residencias y una lista de espera de 6.000 personas según datos del Ayuntamiento de Barcelona. Además, los usuarios de un servicio de ayuda a domicilio reciben de media una hora de atención domiciliaria cuando, según las encuestas, necesitarían cerca de 18.
De aquí surge, en parte, el proyecto ARI, un robot social pensado para complementar la atención y los cuidados a las personas mayores. “Nació también fruto de las sesiones de trabajo con entidades del Tercer Sector especializadas en los primeros estados de deterioro cognitivo de las personas mayores en las cuales apareció la necesidad de un asistente virtual que mejorase su calidad de vida”, añade Julio Calvo, director de la Oficina técnica de innovación social del área de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Barcelona. Ya hace un tiempo que el Ayuntamiento de Barcelona y la Fundación Mobile World Capital pusieron en marcha una prueba piloto con este asistente robótico inteligente que acompaña a personas mayores que viven solas. Ahora se ha mejorado el prototipo, dando forma al ARI II. “El objetivo es que el nuevo modelo se ponga a prueba entre 2022 y 2024 en un centenar de hogares más de personas mayores y equipamientos sociales”, explica Lluís Torrens, director de Planificación e Innovación del área de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Barcelona. La primera versión del robot ARI se probó en una decena de hogares y los resultados preliminares obtenidos mostraron la capacidad de este widget para mejorar la calidad de vida de los usuarios sin reducir el apoyo o los servicios personales que podían estar recibiendo: permitió incorporar elementos de inteligencia artificial configurables según las necesidades específicas de cada persona.
¿Cómo es el ARI II?
La nueva versión del robot, con una altura de un metro, una anchura de 35 centímetros y un peso de 12 kilogramos, es capaz de desplazarse por toda la casa, con una autonomía de aproximadamente ocho horas e incorpora una mayor capacidad de interacción con el usuario. Está diseñado para hacer un seguimiento de la persona; hacerle un reconocimiento facial; moverse de forma autónoma por la casa y detectar y esquivar obstáculos; hacer recordatorios y mantener diálogos de seguimiento, o realizar videollamadas.
Álvaro Posada, voluntario social en Radars y VínclesBCN, es una de las personas que está testando el ARI II. Desde hace cuatro meses convive en casa con ‘Teni’: “El año pasado colaboré con las pruebas a un modelo anterior, más pequeño, Misty. Ahora paso informes sobre el ARI II. Es capaz de recorrer la casa, acercarse hasta dónde estoy, hacer un reconocimiento facial o hacerme recordatorios. Es muy fácil de utilizar, solo se tiene que encender y apagar, ¡y ni eso! No se tiene que tocar nada. Pienso que es una herramienta que puede ser muy útil para atender a personas mayores que vivan solas, que tengan problemas de movilidad… no puede suplir una ayuda humana, pero hace servicio y compañía”, explica Posada. Álvaro nos dice que el robot también es capaz de detectar si la persona usuaria está en el suelo y llamar al 112; cuenta con una base donde se carga de forma autónoma y, también, incorpora una bandeja posterior donde se puede colocar un blíster de pastillas. «Buenos días Álvaro. ¿Cómo estás? ¿Cómo has dormido? ¿Cuántas veces te has despertado?». Esta es la conversación que cada mañana puede mantener Álvaro con Teni quién, a las 18h también le recuerda que es momento de dejar de trabajar y salir a andar y estirar las piernas. Posada, gracias a su experiencia atendiendo a personas mayores y a su convivencia ahora con el robot, aporta al proyecto una visión que va más allá del punto de vista técnico. “Continúan trabajando para mejorar el robot: están programándole un diccionario para que pueda mantener conversaciones sencillas, o quieren que el usuario pueda ponerle un nombre. Están estudiando, también, qué tipo de funciones pueden ser más útiles para la atención a la persona”, añade Posada que, por su parte, les ha recomendado ligar el robot a una pulsera que le permita localizar en todo momento dónde está ubicado el usuario en casa.
El origen y el futuro del ARI II
El proyecto surgió en el marco de la alianza 5G Barcelona y la convocatoria del reto ‘Cómo mejorar la calidad de vida de las personas mayores mediante la tecnología’ lanzada por la Fundación Mobile World Capital Barcelona. Hasta ahora la MWCapital ha invertido 125.000 euros y durante los próximos tres años la extensión de la prueba piloto contará con una inversión de 150.000 euros por parte del Ayuntamiento y 125.000 euros más por parte de la MWCapital. “El potencial del ARI pasa porque, lejos de sustituir ninguno de los servicios personales actuales que cada persona pueda recibir, el robot puede ayudar a detectar con rapidez situaciones de urgencia sobrevenida en la vivienda, como pueden ser caídas o accidentes domésticos, así como ayudar a mantener la pauta adecuada de medicación o recordar fechas de interés como puede ser una visita médica, por ejemplo, así como resolver dudas puntuales”, explican desde el Ayuntamiento de Barcelona.
Los diferentes estudios hechos hasta ahora constatan que el 90% de las personas mayores quieren quedarse en casa el máximo de tiempo posible y no ir a una residencia o a casa de sus familiares. Instrumentos como el robot ARI pueden facilitar esta tarea, coordinándose con servicios específicos que ya existan como por ejemplo el Servicio de Atención a domicilio (SAD) o el Servicio de Teleasistencia Municipal, entre otros.
Con la ampliación de la prueba piloto, el Ayuntamiento de Barcelona quiere disponer de una base de datos más grande que permita valorar de forma exhaustiva la posibilidad de incorporar el robot a la cartera de servicios ya existente. Lluís Torrens, director de Planificación e Innovación del área de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Barcelona, detalló el estado del proyecto y el funcionamiento del nuevo modelo de robot social en la jornada que organizamos desde m4Social en el Mobile World Congress 2022. Puedes recuperar la presentación en nuestro perfil en Slideshare.