Marta Martorell Camps es líder en innovación de procesos participativos a escala local, regional y nacional. Actualmente, ejerce como directora del área de Tecnologías Sociales Digitales de la Fundació i2CAT que, entre otras, trabaja líneas de investigación centradas en el impacto de estas tecnologías en la ciudadanía, en la puesta en marcha de técnicas y metodologías de facilitación para la adopción de nuevas tecnologías alineadas con estilos de vida saludables y valores culturales o en el diseño e implementación de políticas y estrategias de innovación para la transformación social y digital. Hablamos con ella para conocer mejor la tarea de i2CAT y para reflexionar sobre la sociedad digital del futuro.
¿Cómo nace i2CAT y con qué objetivo?
El centro se constituyó formalmente el 22 de septiembre de 2003 como un espacio de investigación e innovación tecnológica con la voluntad de abrir camino en los usos y capacidades que ofrecía la red de internet. Hay que destacar, además, que el centro fue co-diseñado de manera colaborativa entre universidades, el gobierno de entonces y empresas y entidades del sector público y privado. La evolución de i2CAT ha estado siempre ligada a la de las tecnologías digitales avanzadas, desde las pruebas con una red wifi incipiente que prometía conectividad en todas partes, la usabilidad de la banda ancha, el adelanto de la fibra óptica, o el trayecto que ha llevado las generaciones móviles desde la 1G hasta el 6G que se está investigando actualmente. A la vez, el centro siempre ha trabajado por las necesidades de la ciudadanía atendiendo la diversidad territorial catalana y global.
Más de 220 personas trabajan en i2CAT. Acabamos de celebrar nuestro 20.º cumpleaños y podemos decir que somos un centro de referencia en el ámbito de las tecnologías digitales avanzadas y de la innovación social y digital a escala de Cataluña, estatal y europea.
¿Qué tipo de actividades y proyectos impulsáis desde la organización?
La Fundación i2CAT es un centro de investigación tecnológica que lidera actividades de I+D+I en tecnologías digitales avanzadas y su arquitectura, aplicaciones y servicios. Llevamos más de 20 años trabajando en proyectos y actividades de investigación digital e innovación en los ámbitos de la 5G/6G, IoT, tecnologías inmersivas e interactivas, ciberseguridad, blockchain, inteligencia artificial, comunicaciones espaciales y tecnologías de la sociedad digital.
Somos una de las entidades más activas en los programas de investigación financiados por la Comisión Europea. Desde 2006, i2CAT ha participado en 95 proyectos y ha obtenido más de 34 millones de euros de financiación en el marco de los programas FP6, FP7, H2020 y Horizon Europe para desarrollar proyectos pioneros en el ámbito de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
Además, desde el centro colaboramos con empresas, administraciones públicas, instituciones académicas y la ciudadanía para contribuir en la definición y vertebración de un sistema universal de innovación digital y que Cataluña sea una sociedad digital avanzada y se consolide como modelo de referencia más allá de nuestras fronteras.
¿Como de importantes son las alianzas y la colaboración con otros agentes en vuestro día a día?
i2CAT participa activamente en las estrategias y políticas digitales de la Generalitat de Cataluña y otras administraciones públicas para impulsar su transformación tecnológica digital y apuntalar el ecosistema digital público. También coopera estrechamente con el sector privado (empresas y entidades privadas) desarrollando soluciones innovadoras que resuelvan retos complejos. Estas colaboraciones se canalizan a través de varias modalidades de transferencia tecnológica, como por ejemplo patentes y spin-offs. La fundación tiene un compromiso firme en la creación de un futuro digital que no deje a nadie atrás.
En mi día a día como directora del área de Digital Society Technologies del centro, las alianzas y la colaboración con otros agentes son muy importantes. Nuestros proyectos están basados en ecosistemas de innovación universal y, por lo tanto, con perspectiva de inclusión y en la llamada cuádruple hélice. Trabajar con otras organizaciones, empresas e instituciones nos permite compartir nuestro conocimiento y crear sinergias que nos lleven a desarrollar proyectos más innovadores e impactantes. A través de las alianzas, podemos compartir conocimientos, tecnologías y recursos, aumentando así nuestra capacidad para abordar retos complejos e impulsar la innovación en el campo de las tecnologías de la sociedad digital. En resumen, las alianzas y la colaboración son fundamentales por los éxitos compartidos y para el desarrollo de soluciones que tengan un impacto positivo en la sociedad.
Fomentáis la colaboración para diseñar y construir la sociedad digital del futuro. ¿Cómo os imagináis esta sociedad? ¿Cómo de lejos estamos de ella?
Yo, particularmente, me imagino una sociedad digital del futuro basada en un Estado del Bienestar digital. Es decir, una sociedad digital socialmente inclusiva, económicamente sostenible, políticamente democrática y interseccionalment equitativa. En esta sociedad, las tecnologías digitales tendrían que estar al servicio de las personas. A mí, me gusta imaginármela sin barreras para ninguna persona, con una aproximación interseccional y universal.
Para conseguir esta visión, es necesario fomentar la colaboración entre diferentes sectores de la sociedad, incluyendo gobiernos, empresas, instituciones académicas, organizaciones sin ánimo de lucro y la misma ciudadanía. La colaboración es clave para diseñar e implementar políticas, programas y proyectos que aborden las desigualdades digitales y promuevan la inclusión digital. También para crear las herramientas necesarias para una capacitación progresiva que garantice que todas las personas tengan acceso a las oportunidades que ofrece la sociedad digital.
Por lo tanto, es crucial continuar fomentando la colaboración y la innovación para abordar estos retos de manera efectiva y avanzar hacia una sociedad digital más equitativa y justa para todo el mundo.
¿En esta sociedad digital que estamos construyendo, qué tenemos que tener en cuenta para garantizar que el conocimiento y la tecnología estén al servicio de las personas?
És necessari adoptar una aproximació centrada en les persones, en els seus drets i necessitats, assegurant que les tecnologies siguin desenvolupades i utilitzades de manera responsable i inclusiva.
Resulta molt important tenir en compte l’accessibilitat i la inclusió en el disseny i en l’ús de les tecnologies. És important involucrar a les persones en el procés de disseny, desenvolupament i implementació de les tecnologies i les polítiques digitals, assegurant-se que les seves veus siguin escoltades i que les seves necessitats siguin considerades. A la vegada, s’ha de garantir l’educació i l’alfabetització digital per a tothom.
Finalment, crec que el disseny i l’evolució tecnològica han d’estar guiades per principis ètics que prioritzin el benestar de les persones i assegurin que no es discrimini ni es causin danys a cap persona. Per això, cal total transparència i responsabilitat en el desenvolupament i en l’ús de les tecnologies i, per descomptat, cal tenir en compte l’impacte ètic i social d’aquestes.
Com hem d’avançar cap a una economia i societat digital sense deixar ningú enrere?
Es necesario adoptar una aproximación centrada en las personas, en sus derechos y necesidades, asegurando que las tecnologías sean desarrolladas y utilizadas de manera responsable e inclusiva.
Resulta muy importante tener en cuenta la accesibilidad y la inclusión en el diseño y en el uso de las tecnologías. Es importante involucrar a las personas en el proceso de diseño, desarrollo e implementación de las tecnologías y las políticas digitales, asegurándose que sus voces sean escuchadas y que sus necesidades sean consideradas. A la vez, se tiene que garantizar la educación y la alfabetización digital para todo el mundo.
Finalmente, creo que el diseño y la evolución tecnológica tienen que estar guiadas por principios éticos que prioricen el bienestar de las personas y aseguren que no se discrimine ni se causen daños a ninguna persona. Por eso, hace falta total transparencia y responsabilidad en el desarrollo y en el uso de las tecnologías y, por supuesto, hay que tener en cuenta el impacto ético y social de estas.
¿Cómo tenemos que avanzar hacia una economía y sociedad digital sin dejar a nadie atrás?
Para avanzar hacia una economía y una sociedad digital inclusiva y equitativa es necesario adoptar un enfoque integral que priorice la participación comunitaria, el acceso universal a la formación y la alfabetización digital, la promoción de la diversidad, la protección de los derechos digitales y la innovación socialmente responsable. Este enfoque es fundamental para construir una sociedad digital justa y transversal.
Y, sobre todo, hay que tener en cuenta el desarrollo y la implantación de las tecnologías digitales avanzadas (TDA) para la mejora de las condiciones sociolaborales de las personas más vulnerables y liderar la transición hacia una digitalización inclusiva.
Los gobiernos y la sociedad tenemos que entender que estas tecnologías digitales tienen que estar inspiradas en una investigación e innovación sobre los nuevos derechos humanos en la era digital. La misma UE propone una estrategia en favor de una sociedad digital sustainable and human centric, es decir, sostenible y que ponga a las personas en el centro.
¿Cómo puede contribuir el tercer sector social a los procesos de investigación e innovación en tecnologías digitales avanzadas que impulsáis?
El tercer sector social puede contribuir de manera significativa a los procesos de investigación e innovación en tecnologías digitales avanzadas, haciendo que las soluciones desarrolladas estén orientadas a mejorar la calidad de vida de los colectivos en situación de vulnerabilidad. La colaboración estrecha entre el tercer sector, los/las investigadores/se y las personas responsables de desarrollar la tecnología es clave para conseguir este objetivo: una sociedad digital más inclusiva y justa.
Las organizaciones del tercer sector tenéis una comprensión muy cuidadosa y profunda de las necesidades y los retos de los colectivos en situación de vulnerabilidad y, por lo tanto, podéis contribuir muy especialmente en la investigación, en la cocreación, en el codiseño y en el desarrollo de una tecnología para resolver estas problemáticas específicas.
Igualmente, también es clave que las organizaciones del tercer sector estéis involucradas en las pruebas piloto y en la evaluación, para recoger información sobre la viabilidad, el impacto y las mejoras continuas a adoptar. Y, finalmente, el papel del tercer sector en la implementación de las soluciones en y a través de las comunidades es esencial.